Los extintores con espuma AFFF (Aqueous Film-Forming Foam) son equipos diseñados para combatir incendios de líquidos inflamables. Su eficacia radica en la formación de una capa acuosa que sofoca las llamas y evita la reignición del fuego. Este tipo de extintor es muy utilizado en entornos industriales y estaciones de servicio debido a su capacidad para controlar rápidamente los derrames de combustibles. Además, a diferencia de un extintor para casa, no se recomienda su uso en incendios donde haya presencia de corriente, ya que el agua en su composición puede ser conductora.
Uno de los principales beneficios de un extintor de espuma es su capacidad para enfriar la superficie afectada por el fuego, reduciendo la temperatura y evitando que los vapores inflamables se propaguen. Esto lo hace ideal para incendios de clase B, como los originados por gasolina, aceites o solventes. A diferencia de otros agentes extintores, la espuma penetra en los líquidos inflamables, creando una barrera que impide la evaporación de sustancias peligrosas. Es fundamental en la protección de áreas donde se almacenan grandes cantidades de combustibles.
Tanto el extintor CO2 como el de espuma tienen aplicaciones específicas dependiendo del tipo de fuego que se deba extinguir. Mientras que el CO2 es ideal para incendios eléctricos y evita daños en equipos electrónicos, el de espuma se especializa en fuegos de líquidos inflamables, ofreciendo una extinción más duradera. El dióxido de carbono actúa desplazando el oxígeno y reduciendo la temperatura, pero su efecto es momentáneo, ya que no deja residuos que impidan la reignición. Por ello, es importante elegir el extintor adecuado según el riesgo presente en cada entorno.
Si bien el extintor ABC es uno de los más versátiles y adecuados para múltiples tipos de incendios, no es el más eficiente en fuegos de líquidos inflamables. Este tipo de extintor utiliza polvo químico seco que corta la reacción en cadena del fuego, pero no crea una barrera protectora sobre el líquido incendiado. En cambio, los extintores con espuma AFFF forman una película acuosa que evita que los vapores inflamables se liberen, lo que reduce significativamente la posibilidad de que el incendio vuelva a propagarse tras la extinción inicial.
En España, la normativa de seguridad contra incendios exige la instalación de extintores adecuados a cada tipo de riesgo. Los extintores con espuma AFFF son recomendados en industrias químicas, refinerías, gasolineras y almacenes de productos inflamables. Su efectividad ha sido comprobada en múltiples situaciones de emergencia, por lo que su implementación es clave en cualquier plan de protección contra incendios. Además, su uso es compatible con la legislación vigente, garantizando un alto nivel de seguridad en diferentes sectores.
Para asegurar la efectividad de los extintores con espuma AFFF, es fundamental realizar inspecciones periódicas y revisiones técnicas. Se recomienda verificar el estado de la boquilla, el contenido del agente extintor y la presión interna del cilindro. En caso de detectar anomalías, se debe contactar con un servicio técnico especializado para garantizar su correcto funcionamiento. Además, es importante que el personal esté capacitado para utilizar este tipo de extintor, ya que su correcta aplicación puede marcar la diferencia en una situación de emergencia.
Seleccionar el extintor correcto puede ser determinante para evitar la propagación de incendios y minimizar daños materiales. Los extintores con espuma AFFF ofrecen una solución efectiva para fuegos de líquidos inflamables, proporcionando una barrera protectora que impide la reignición. Aunque existen otras opciones, como el extintor CO2, el de espuma es una alternativa eficaz para entornos donde el riesgo de incendios de clase B es alto. Invertir en la seguridad adecuada es esencial para garantizar la protección de personas y bienes en cualquier instalación.